¡Espero que muy bien!
Es una gran dicha, tener un donante de "comunión
espiritual"
Intentaré explicar esto, primero que nada, copiándote y
pegándote el párrafo final de mi escrito sobre los vampiros reales, permiso,
ahí va:
Será interesante si el vampiro entre sus muchas vidas ha
sido monje, pues éste seguro que intenta vivenciar esas memorias, sintiendo que
la verdadera dosis de energía psíquica que puede beber está en la Comunión
Espiritual con sus donantes y ésta no consistirá en otra cosa que en una
Comunión de Amor, que en definitiva es una Auténtica Comunión de Vida.
Acá le brindo el link respectivo para que pueda leerlo completo quien hubiere lugar:
SACANDO CONCLUSIONES SOBRE EL VAMPIRO | SISMO LITERARIO
Esto requiere varias aclaraciones de mi parte que tal vez a
vos por tu creencia en la reencarnación no te hagan falta, pero, explicarlo yo,
es muy importante para el respeto de mi propia fe y el cumplimiento de dogmas
que los veo como cosas buenas para mí
Todos tenemos presentimientos de que hemos tenido otras
vidas pasadas, sin embargo, por la promesa de resurrección que nos hace Cristo a
los católicos, nosotros hemos podido armonizar ese dogma de la no reencarnación
con la teoría de la Memoria Genética esto significa que tal cual lo han
demostrado las ciencias respectivas tanto naturales como sociales, de nuestros
ancestros heredamos cierto cúmulo de genes que no solo nos brindan una carga o
herencia biológico sino también CULTURAL.
En base a esta memoria cultural ancestral sentimos que estos
ancestros viven dentro nuestro y por eso nos solemos creer por ejemplo ese
monje capuchino que yo siento que fui en otra vida.
Es obvio que un capuchino ancestro mío me heredo genes, y lo
hizo para darle forma a esta fe mía de tipo "constelaciones". Este monje tuvo hijos que el Dr. Ramón. J. Cárcano en su antigua tesis sobre las
diferentes clases de hijos, a los hijos de los curas y de monjas
los llamaba: "Hijos Sacrílegos"
De ahí provengo, de un linaje Sacrílego por algunos de los muchos ríos de sangre que tengo en mi nutrido árbol genealógico
Habiendo aclarado mi fe y mi dogma, en pro de la no reencarnación y a favor de la memoria genética, ahora me valgo del símbolo o la poesía y paso a hacer metáfora y de ahora en adelante diré: "en tal o cual vida pasada" fui tal o cual cosa y usted, como lectora sabrá ya a ciencia cierta, que me estoy refiriendo a lo que fueron los ancestros carnales que me heredaron esos genes suyos y me los hacen sentir fuertísimo.
Ahora sí, para continuar con su donación:
Nosotros los vampiros que necesitamos energía de muchas
fuentes para alimentar esa "falta generalizada de energía propia" y que
entre nuestros alimentos más importantes y "sensibles" esta la
energía psíquica de nuestros donantes voluntarios, que nos prestan su interés y las devoluciones al encanto que les solemos provocar los gentiles, intelectuales, nobles, exitosos y
finos vampiros.
Cuando hemos sido en otras vidas monjes, sabemos que esa
energía que bebemos y que "comemos", es sangre y cuerpo
"fraterno", siguiéndolo a Cristo que en la Eucaristía se convierte en
cuerpo y sangre para la comunión SACRAMENTAL.
Pues, por medio de mi extraño y pagano catecismo, la comunión
espiritual no sacramental, es la que se comparte con un prójimo en la misa
doméstica, de entre las mejores: son el compartir de la mesa (almuerzos o cenas), puesto que misa no viene de otra palabra ni más, ni menos y en absoluta rara que: Mesa.
LA MESA DE LA ÚLTIMA CENA ES, FUE Y SERÁ LA CRUCIAL, DONDE
JESUS INSTITUYE LA EUCARISTIA PARA SIEMPRE.
AMÉN.
Comunión, en la Madre Iglesia, es entonces la sacramental y se
la llama Eucaristía y allí, comemos el cuerpo de Cristo y bebemos su sangre.
Comunión Espiritual, es la que se hace de dos maneras:
a) Con pecado mortal, en la Madre Iglesia, pidiéndosela
humildemente al Espíritu Santo, generalmente arrodillados, en oración, y mientras el conjunto de los demás fieles peregrinan hacia la hostia, y sin comerla a esta hostia, ni beberlo al cáliz (por eso de en pecado mortal y que antes merece de la Confesión, también Sacramental, para estar pulcro y puro, para tomar la Eucaristía).
b) Todo tipo de comunión con el prójimo de la que le estoy enseñando y en cualquier lugar y situación, cuando uno le brinda su sangre (amor que recibe el ego bueno que no hace más que regodearse sanamente con los elogios, gratificaciones, reconocimientos y muchas otras satisfacciones a necesidades básicas universales de reconocimiento y aprobación). También le come su cuerpo (amor físico del bueno), esto último, por ejemplo, cuando estoy con un amig@ del que me gustan mucho sus gestos y todas sus manifestaciones físicas, como así también, su voz, su tono, etc. (esto es la afinidad física).
Beber la sangre y comer el cuerpo del prójimo, ambas son el poderoso alimento del alma que se convierten en uno y que no es otra cosa más que el Amor a secas, o liso y llano..., se convierte en la verdadera y auténtica necesidad humana universal debidamente saciada (la de recibir y dar amor).
Sabemos ahora que la sangre del prójimo es idéntica a la energía psíquica que él nos dona, cuando la relación es sana y que el comer su cuerpo, no es otra cosa más que eso: su cuerpo nos cae re contra simpático, y en la relación casta de una pareja, el cuerpo se lo "comulga" hasta la intimidad más íntima de estos dos seres que se han elegido en exclusiva para este tipo de amor único de pareja o erótico (como le llama Eric Fromm).
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